
Porque has creído
tus certezas, verdades.
Porque has pensado
a los cansados, cobardes.
Porque ha coronado tu mano
la hoz de la ignorancia
con la aprensión que nace
desde la conciencia de tu erebo.
Porque le has negado
a la volición erial
que te circunda,
lene corriente
de tu íntimo lavajo.
Porque al fin no has comprendido,
jamás, la entrega...
destiérrate, epígono,
de nuestra senda
y ve a coronar tu derrota
ante los que, como tú,
y ve a coronar tu derrota
ante los que, como tú,
nunca se han atrevido...
Ilustraciones: Laura Hoppe
Texto: Diego L. Monachelli
Del libro de ilustraciones poetizadas
“Diez cosas que pueden hallarse detrás de una puerta”
No hay comentarios.:
Publicar un comentario